Cuando hablamos de materiales para encimeras, la elección entre cuarzo y granito es una decisión importante. A diario recibimos opiniones variadas sobre qué material es superior para el uso diario. Si nos centramos en la durabilidad, uno de los aspectos más destacados del granito es su resistencia al calor. Esto se debe a su origen volcánico; este material soporta temperaturas de hasta 1200 grados Fahrenheit sin sufrir daños. En cambio, el cuarzo, aunque también resistente, puede dañarse con utensilios de cocina extremadamente calientes.
Ahora, hablando de resistencia a los arañazos, el cuarzo ofrece una ventaja notable. Está compuesto en un 90% de cuarzo natural, con resinas y pigmentos que le dan su dureza característica. De hecho, en la escala de Mohs, que mide la dureza de los materiales, el cuarzo tiene una puntuación de 7. Para ponerlo en contexto, el granito se sitúa entre un 6 – 6.5 en la misma escala. Esta diferencia puede parecer pequeña, pero en la práctica, esa diferencia en dureza se traduce en un menor riesgo de daños superficiales en el cuarzo.
Además, desde el punto de vista de la estética y la personalización, el cuarzo tiene un amplio abanico de posibilidades. Las encimeras de cuarzo pueden tener un diseño continuo y homogéneo, algo que agrada a muchos diseñadores de interiores. Empresas como Cosentino han revolucionado el mercado con su línea Silestone, ofreciendo más de 90 colores y texturas diferentes. En contraste, el granito, al ser un producto natural, ofrece patrones únicos formados por la naturaleza, pero que dependen del bloque específico de piedra.
En cuanto a la facilidad de mantenimiento, el cuarzo también tiene una clara ventaja. Al ser un material no poroso, las encimeras de cuarzo no requieren sellado, lo que se traduce en menos mantenimiento a largo plazo. Los propietarios pueden limpiar derrames diarios con facilidad, sin preocuparse por manchas permanentes. El granito, por otro lado, es poroso por naturaleza y debe sellarse al menos una vez al año para mantener su integridad y aspecto.
El costo también juega un papel determinante en la elección entre estos dos materiales. ¿Cuál es más barato? Depende. Generalmente, el costo del cuarzo puede superar al del granito. Pero el precio varía significativamente según el diseño, el grosor y la marca. Piensa en un presupuesto que oscile entre $50 y $120 por pie cuadrado para ambos materiales, más la instalación. Por ejemplo, una encimera de cuarzo Silestone puede llegar a ser algo más cara que algunas variedades de granito, especialmente las más comunes.
Finalmente, desde una perspectiva medioambiental, el granito es considerado más natural, ya que se corta directamente de la naturaleza y apenas se procesa. Sin embargo, el cuarzo requiere más procesamiento y, por ende, puede tener un impacto ambiental mayor debido a la resina que contiene y al proceso de manufactura. Empresas como Caesarstone están invirtiendo en prácticas más sostenibles, lo que puede influir en tu decisión si la ecología es importante para ti.
Así que, al decidir qué material es mejor para soportar el uso diario, uno debe considerar estos diversos factores y reflexionar sobre qué características valoras más en tu hogar. El dilema no tiene una solución única y depende mucho del uso previsto, tus preferencias estéticas y tu presupuesto. Si necesitas profundizar en la elección entre estos materiales puedes visitar [este enlace](que es mejor cuarzo o granito).